Desde amaneceres brumosos hasta impresionantes atardeceres, la majestuosa y abundante bahía de Chesapeake ha influido en la vida de la región durante generaciones. Los barqueros trabajando y los navegantes recreativos jugando frecuentan los anchos y hermosos ríos, las bahías traseras, las pintorescas calas y los bulliciosos angostos que albergan peces, cangrejos, ostras, águilas pescadoras, garzas y patos marinos.

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A lo largo de los siglos, embarcaciones de todo tipo han navegado por estas aguas. desde las primeras canoas, listados, ojos de insecto y clíperes. A ferries de pasajeros, veleros, cruceros a motor y barcos de carreras de alto rendimiento. Los restaurantes frente al mar, los mercados de mariscos, las empacadoras y los puertos deportivos a lo largo del canal Kent Narrows son evidencia de una antigua cultura marítima.